
La consejería de Fomento ha adjudicado la compra de 33 autobuses eléctricos en dos lotes por un importe de 20,7 millones. Sin embargo, ha dejado desierto el concurso para la compra de otros ocho vehículos de este tipo con carga mediante ‘pantógrafo invertido’. Es decir que pudieran cargarse desde el techo en cuestión de minutos.
El primero de los lotes resueltos se lo ha adjudicado el fabricante albaceteño KL Buses (King Long). Corresponde a cinco vehículos con un mínimo de 30 asientos y capacidad para pasajeros de pie, que estarán destinados tanto al transporte urbano o suburbano. El precio que pagará la Comunidad por estos cinco autobuses 0 Emisiones es de 2,5 millones de euros (IVA Incluido).
El segundo de los lotes lo cubrirá la multinacional de origen vasco Irízar, que entregará 28 autobuses, también 100% eléctricos. Estos vehículos, con un mínimo de 75 asientos (todas las plazas sentadas), podrán hacer transporte interurbano, y tienen un precio total de 18,2 millones.
No hubo, en cambio, ninguna oferta para construir 4 autobuses eléctricos de la clase II para un mínimo de 30 plazas (todas sentadas) y que pudiera cargarse tanto mediante manguera como por el sistema de pantógrafo invertido. En este caso el precio de licitación era de 2,4 millones.
Por último, al cuarto lote sí se presentó un candidato, pero fue desestimado por errores en la oferta. Con un valor de tres millones, la compra era de cuatro autobuses eléctricos, también clase II, con 75 plazas y, asimismo, con posibilidad de carga desde el techo.