
La tasa de inflación anual de la zona del euro fue del 2,6% en mayo, frente al 2,4% de abril. Un año antes, la tasa era del 6,1%. Por su parte, en el conjunto de la Unión Europea, la inflación aún es más alta: 2,7%, una décima más que en abril; si bien en mayo de 2023 la tasa era del 7,1%.
Estas cifras son publicadas por Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea.
Las tasas anuales más bajas se registraron en Letonia (0,0%), Finlandia (0,4%) e Italia (0,8%). Las tasas anuales más altas se registraron en Rumanía (5,8%), Bélgica (4,9%) y Croacia (4,3%). En comparación con abril, la inflación anual disminuyó en once Estados miembros, se mantuvo estable en dos y aumentó en catorce.
En el caso de España, la tasa de inflación armonizada supera la media y se colocó en el 3,8%, situándose como el quinto más más inflacionista de Europa tras una subida de cuatro décimas sobre abril.
En mayo, la mayor contribución a la tasa de inflación anual de la zona del euro provino de los servicios (+1,83 puntos porcentuales, pp), seguidos de alimentos, alcohol y tabaco (+0,51 pp), bienes industriales no energéticos (+0,18 pp) y energía. (+0,04 puntos porcentuales).
Estas subidas dificultan aún más nuevas rebajas de los tipos de interés que debe aprobar el Banco Central Europeo.