Familiares y amigos de José Molina, durante el homenaje que le ha rendido el Círculo de Economía
El Círculo de Economía ha entregado a título póstumo, el primer premio a la ‘Transparencia, ética y buen gobierno’ a José Molina Molina. El acto, celebrado en el salón de actos del Casino de Murcia, reunió a amigos, familiares y admiradores del premiado y su trayectoria.
El Círculo ha querido homenajear, en su primer premio, a José Molina Molina, primer presidente del Consejo de la Transparencia e impulsor del mismo, así como asociado del Círculo, por su incansable labor en defensa de la calidad de las instituciones del Estado y por su esfuerzo por difundir la transparencia, la ética y el buen gobierno en el ámbito público y privado.
La entrega de este premio, que había sido acordada con anterioridad, ha coincidido, precisamente, con la eliminación del Consejo de la Transparencia con los votos mayoritarios de PP y Vox, que será sustituido por un comisionado.
El presidente del Círculo, Joaquín Hernández, justificó la creación del premio en la necesidad de impulsar la honestidad, la integridad y la transparencia en la actividad económica, política y administrativa para contribuir a una mayor calidad de nuestras instituciones.
Enumeró algunos datos del “apabullante” currículum de José Molina y destacó “su pasión ilimitada por fomentar la economía participativa y su convicción de que era posible transformar nuestra sociedad empoderando a los ciudadanos y haciéndoles partícipes de las tomas de decisiones en las cuestiones públicas que les afectan”. Se refirió al homenajeado como “una persona idealista, desinteresada y perseverante cuyo ejemplo servirá, sobre todo a los más jóvenes, a comprometerse por una sociedad mejor.
Tomás Zamora, antiguo presidente de la Croem y del Consejo Social de la Universidad de Murcia, comentó las cualidades excepcionales de su amigo José Molina compartiendo algunas anécdotas personales de su extraordinaria fortaleza y vitalidad, incluso en sus últimos momentos y destacó su entrega a la Universidad de Murcia con la que colaboró en la elaboración de su Plan Estratégico; su generosidad con la Croem para lograr impulsar en las empresas de la región un notable avance en su calidad certificada y la contribución a la difusión de los presupuestos participativos, a través de una Tesis Doctoral.
Finalizó ironizando sobre lo mal que jugaba al mus. “jugaba fatal, porque no sabía mentir, ni en el juego” y aseguró que “su siembra ha quedado en mucha gente”.


