
Esta previsión es inferior a la media del crecimiento nacional que estima del 2,5%, pero sí supera el crecimiento del PIB del año 2023, que fue del 1,8%.
En la industria, el elevado peso del sector de bienes de consumo ayudará a impulsar el crecimiento. Sin embargo, se espera que en los servicios, los sectores de servicios profesionales y a empresas (uno de los pilares para el conjunto del país) tengan una presencia menos relevante.
El empleo en términos de la EPA avanzaría un 1,6%, lo que dejaría la tasa de desempleo en el 12,3%, cinco décimas menos que en 2023, pero todavía por encima de la media nacional.
En cuanto a las cuentas públicas, la Región de Murcia fue una de las comunidades con mayor déficit tanto en 2022 como en 2023: un 3% del PIB y un 2,3%, respectivamente.
Baleares (3,5%), Canarias (3,2%) y Madrid (2,6%) son las comunidades que más crecerán este año (las únicas que lo harán por encima de la media nacional del 2,5%), seguidas de cerca por Aragón (2,5%) y Cataluña (2,5%).
En el extremo opuesto, Asturias y La Rioja registrarán el menor crecimiento del PIB, ambas con un 1,9%.
Estas pautas de crecimiento se reflejarán en la evolución de las comunidades autónomas. Así, el avance del PIB regional en 2023-2024 depende de cuatro factores principales. En primer lugar, el elevado peso del turismo, que explica que Baleares y Canarias lideren el crecimiento, y que otras, como Andalucía (2,4%), se acerquen a la media pese al relativamente débil comportamiento de los sectores no turísticos.
Otro factor diferencial es la presencia de un sector de servicios de mercado competitivo (sobre todo en el segmento de servicios a empresas) capaz de aprovechar el auge de las exportaciones de estos productos, así como la demanda procedente de los fondos europeos. Este es el caso de Madrid, Cataluña, Navarra y País Vasco.
La presencia de una industria potente de bienes de consumo, y del sector automotriz en particular, es también una ventaja habida cuenta de las pautas esperadas del crecimiento. Algunas de las comunidades antes mencionadas, así como Aragón, Castilla y León, Galicia y, tras un periodo de ajustes, Comunidad Valenciana, podrían ser las más beneficiadas a este respecto.