Domingo, 26 de Octubre de 2025
Diario de Economía de la Región de Murcia
OPINIÓNSi es tu hobby, no es negocio
  • Buscar
José Antonio Onsurbe

Si es tu hobby, no es negocio


En el mundo del emprendimiento, es común escuchar el consejo de seguir tu pasión y convertir tus hobbies en negocios basándose en las viejas palabras de Confucio. Sin embargo, esta idea, aunque atractiva, puede ser engañosa y peligrosa si no se aborda con precaución. Como emprendedores y empresarios, debemos entender la diferencia entre un hobby y un negocio, y por qué esta distinción puede ser la clave del éxito o el fracaso.


La Trampa del Hobby

 

El consejo de "elige un trabajo que te guste y no trabajarás ni un solo día de tu vida" es tentador, pero también puede ser muy engañoso. El entusiasmo, el 'grid' del que ya hablamos, por un proyecto, no es suficiente si no tiene un plan claro para generar ingresos. Un hobby es una actividad que hacemos por placer, sin esperar una compensación económica, mientras que un negocio debe ser, ante todo, rentable. Pero ¡Ojo! Tampoco caigamos en la parálisis por análisis, no será necesario elaborar un extenso Business Plan, que al fin y al cabo se basará en la incertidumbre de previsiones más o menos fundadas, pero inciertas. Mi propuesta sería más sencilla, pero que anule la pura intuición y encumbre el ROI y el EBITDA -hablaré de esto próximamente-.


Un ejemplo clásico de esta confusión es el caso de una mujer que decidió abrir una tienda de manualidades en su barrio, inspirada por su amor por la artesanía. Aunque inicialmente logró atraer a un pequeño grupo de clientes, nunca logró escalar su negocio ni hacerlo rentable. Finalmente, tuvo que cerrar la tienda, dándose cuenta de que su pasión por la artesanía no se traducía necesariamente en un modelo de negocio sostenible.


El dinero, la única medida de un negocio

 

El objetivo principal de un negocio es generar ingresos. No importa cuánto disfrutes con lo que haces o cuánta satisfacción te proporcione, si no es rentable, no es un negocio; es un hobby. Esta lección, aunque dura, es esencial para cualquier emprendedor que aspire a tener éxito.

 

[Img #5986]


Consideremos el caso de Blackberry, una empresa que en su apogeo dominaba el mercado de los teléfonos inteligentes con su teclado físico, que era muy apreciado por los usuarios corporativos. Sin embargo, a medida que el mercado comenzó a inclinarse hacia dispositivos con pantallas táctiles, Blackberry se mantuvo fiel a su diseño original durante demasiado tiempo, convencido de que su enfoque único seguiría siendo demandado. Esta falta de adaptación a las nuevas tendencias y necesidades del mercado llevó a la caída de Blackberry, que perdió gran parte de su cuota de mercado ante competidores como Apple y Samsung. Aquí vemos cómo una empresa se aferró a lo que alguna vez fue su ventaja, convirtiéndola en un hobby empresarial, en lugar de adaptarse para mantener la rentabilidad. A eso se le llama 'pivotar' y también hablaré de ello en otra ocasión.


Pasión buena y pasión mala

 

La pasión es un componente esencial del éxito, como ya sabes, pero debe estar bien dirigida. La pasión por la actividad diaria no es tan importante como la pasión por los RESULTADOS que esa actividad puede traer. Es crucial que los emprendedores se enamoren de lo que su negocio les permite lograr, no del negocio en sí. Tan crudo como que “lo que haces no tiene por qué gustarte, mucho menos apasionarte; lo que conseguirás, tus metas, sí deben hacerlo”.


Un buen ejemplo es el caso de los empresarios que fundaron una cadena de tiendas de conveniencia o supermercados no porque amaran el retail, sino porque vieron una oportunidad de negocio en satisfacer las necesidades de consumidores que buscan rapidez y conveniencia o buen y fácil acceso. Su pasión no estaba en el día a día del comercio, sino en los resultados: un negocio rentable que le permitía disfrutar de la libertad financiera y dedicarse a otras actividades que realmente le apasionaban, en su tiempo libre.


Los números no mienten, como el algodón… no engaña

 

En los negocios, las matemáticas son ineludibles. Si tu modelo de negocio no es rentable, ningún esfuerzo o entusiasmo compensará esa deficiencia. Un negocio debe ser analizado fríamente desde el punto de vista económico antes de ser lanzado.


Un caso ilustrativo dentro de una mis pasiones, la gastronomía, es el de un emprendedor que decidió abrir un restaurante gourmet en una pequeña ciudad. Aunque la comida y el servicio eran excelentes, los costos operativos eran demasiado altos en comparación con la cantidad de clientes que la ciudad podía sostener. A pesar de su amor por la gastronomía y la calidad del restaurante, los números simplemente no cuadraban, y el negocio fracasó. En los primeros temas del Master Talent Class sobre emprendimiento y gestión en hostelería, que recientemente terminé, los mayores triunfadores de las principales cadenas hosteleras de España mostraban su modelo de negocio y su “Concepto”, TODOS bajo una premisa, la rentabilidad. Seguramente ninguno de ellos trabaje el concepto original, el primigenio que surgió de su inicial idea de negocio de restauración, pero sí son RENTABLES.


Así que recuerda, debemos ser realistas, no románticos, acerca de las ideas de negocio. Es fácil enamorarse de un concepto, pero si no genera dinero, no será más que una afición muy cara. Si tu negocio no te hace ganar dinero, no es un negocio, es un hobby. No lo descubras demasiado tarde. En lugar de seguir ciegamente tu pasión, aprende a identificar las oportunidades reales que pueden transformarse en negocios exitosos. No caigas en la trampa de convertir tu hobby en un negocio si no tiene el potencial de ser rentable.

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.