
Con apenas 209 hectómetros cúbicos de agua almacenados, los embalses de la cuenca del Segura han entrado en una situación aún más crítica, y solo retienen agua en un 18% de su capacidad, que es de 1.140 hectómetros cúbicos.
Solo en la última semana, la veintena de embalses de la cuenca han perdido -por desembalse y evaporación- ocho hectómetros cúbicos y un punto porcentual en la ratio agua embalsada/capacidad.
En el conjunto de la red hidrográfica española, y pese a las lluvias registradas en los últimos días, la disminución en una semana ha sido de 813 hm³, pasando a situarse, con 29.312 hectómetros cúbicos almacenados, al 52,3% de su capacidad.
Las demarcaciones hidrográficas con mayores porcentajes de capacidad son las cuencas internas del País Vasco, que se mantienen estables en el 90%, y las cuencas del Cantábrico Occidental y Oriental, ambas con un 79%, aunque con ligeras disminuciones de un 2,24% y un 1,37%, respectivamente. Le sigue la demarcación del Miño-Sil, que registra un 77% de su capacidad total, pese a una reducción del 2,01%. El Tajo y el Duero también mantienen un nivel relativamente alto, con un 73% y 72%, respectivamente, de su capacidad, aunque han disminuido en torno a un 2%.
Por otro lado, las cuencas del sur y sureste del país presentan los niveles más bajos. La cuenca Mediterránea Andaluza se encuentra al 26% de su capacidad, mientras que la del Guadalete y Barbate apenas llega al 23%. En contraste, el Guadalquivir y el Júcar presentan un 35% y un 44% de capacidad, respectivamente, mostrando una leve tendencia a la baja.