
Los precios de la energía continuaron a la baja en agosto y retrocedieron hasta un 6% en comparación al mismo mes del pasado año. No obstante, este descenso fue menor que el que se había registrado en julio (-7,1%). Si bien subieron ligeramente los precios de la producción y la distribución de electricidad, este incremento fue compensado por los de elaboración de combustibles, que retrocedieron más de un 5%.
También contuvieron sus precios los bienes de consumo no duradero, que se encarecieron un 1,7%, por debajo de la subida que habían experimentado un año antes, principalmente a consecuencia de la elaboración de aceite.
El conjunto de los precios industriales descenció en España un 1,3% en tasa interanual, pero con diferencia entre las comunidades autónomas. Así, el territorio que experimentó las mayores subidas fue La Rioja (+2,2%), en tanto en el otro extremo se situaron País Vasco (-3,5%) y la Región de Murcia (-3,2%), en ambos casos con una gran industria destinada al refino de petróleo.