
La economía española creció un 0,8% en el segundo trimestre respecto al trimestre anterior en términos de volumen, que es una décima inferior a la del primer trimestre.
La variación interanual del PIB fue del 3,1%, frente al 2,5% del trimestre precedente. La demanda nacional aportó 2,4 puntos y la externa contribuyó con 0,7 puntos.
Las horas trabajadas variaron un 2,4% interanual y el empleo en términos de ocupados equivalentes a tiempo completo un 2,1% -en comparación con el 1,0% y el 3,1% del trimestre precedente, respectivamente-.
Aumenta el consumo interno
El gasto en consumo final se moderó una décima respecto al trimestre anterior al crecer un 2,9% interanual. El de los hogares aceleró tres décimas, al presentar una tasa de un 2,5%, y el de las administraciones públicas registró una tasa del 4,0%, 1,1 puntos menos que en el trimestre precedente.
Por su parte, la formación bruta de capital registró una variación del 1,2%, tasa 1,3 puntos superior a la del trimestre anterior.
Las exportaciones de bienes y servicios presentaron una tasa interanual del 2,6%, lo que supuso 1,1 puntos más que en el primer trimestre. Por su parte, las importaciones registraron una variación del 0,9%, tasa dos décimas superior a la del trimestre precedente.
Desde el punto de vista de la oferta, todos los grandes sectores de actividad presentaron tasas interanuales positivas. Así, el valor añadido bruto de las ramas industriales aumentó un 3,7%, y dentro de las mismas, la industria manufacturera lo hizo en un 5,2%.
El valor añadido bruto de la Construcción creció un 2,5% respecto al segundo trimestre de 2023, el de los Servicios un 3,7%, y el de las ramas primarias un 5,1%.