
El alquiler de una vivienda para pasar parte o todo el verano no es algo nuevo. Al contrario, esta modalidad es incluso anterior al fenómeno turístico, que en España comienza a visualizarse en la década de los cincuenta tras la recuperación de los estragos que deja la Guerra Civil, y en los sesenta se produce el boom. Como se ha señalado, alquilar una vivienda es anterior y no era considerado turismo, si no veraneo; y más en zonas de costa. Un buen ejemplo de ello es lo que venía tradicionalmente ocurriendo en la Región de Murcia en destinos muy concretos: entiéndase los municipios ribereños del Mar Menor (La Manga no tenía construcciones), Mazarrón y Águilas.
Con el avance de las décadas finales del siglo XX, el ’fenómeno veraneo’ fue perdiendo fuerza y se iba limitando a la segunda vivienda en propiedad, en tanto este declive llevaba una dirección opuesta al avance del turismo.
La aparición de la vivienda turística es lo más reciente y su origen está en Estados Unidos (San Francisco). Ofrecía la oportunidad de alquilar el piso de un propietario apenas por unas noches (en ocasiones muy pocas) abaratando así el precio que hubiese costado el alojamiento en un hotel. Otra novedad que ofrecía este negocio entre particulares es que ya no se limitaba a alojamientos en zonas turísticas, la mayoría centradas en la costa, si no que abría la oportunidad de visitar ciudades sin pasar por la recepción de un establecimiento regulado que, además, debía registrar los datos del visitante y ponerlos a disposición de la Policía.
Sin que hubieran trascurrido más que unos pocos años, la expansión de estas viviendas de uso turístico (VUT, por sus siglas) también alcanzó a España, y en este año 2024, el número de plazas en los principales 25 destinos turísticos ronda las 390.000 (solo con reconocimiento oficial), ya cerca de las 420.000 plazas en hoteles en estos mismos destinos que, como se ha indicado, son mayoritariamente de ciudad y en el interior.
En el caso de la ciudad de Murcia, la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) ya alerta de que el número de camas en las VUT ya supera al de los hoteles, siendo esta ciudad una de las que presenta mayores crecimientos en el último año (+28%), por encima del registrado en Madrid (+24,8%), Málaga (+17,8%), Valencia (+26,8%), Sevilla (+19,4%), Alicante (+17,8%), Santander (+15,4%), Gijón (+14,4%) o Barcelona (+8,6%).
Las cerca de mil viviendas de este tipo reconocidas en la capital ofrecen 5.200 plazas, un número que adelanta en unas 500 a las 4.700 camas de los 34 hoteles de Murcia.