
Raül Blanco ha anunciado este martes su dimisión como presidente de Renfe, una salida que será efectiva a partir del 14 de enero. Blanco asumió la presidencia de la empresa pública en febrero de 2023 tras la renuncia de Isaías Taboas y de la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, tras el escándalo por la compra de trenes para servicios de Cercanías en Asturias y Cantabria que no cabían en los túneles.
Blanco ha comunicado que su renuncia se debe a “motivos personales” y que a partir de ahora se dedicará al sector privado tras haber sido secretario general de Industria y Pyme en el ministerio de Industria.
Renfe ha emitido un comunicado en el que hace un balance positivo de la gestión de la compañía en los dos últimos años, rebajando sus pérdidas en un 83% y aumentar un 28% la cifra de negocio.