
Los gobiernos autonómicos de Murcia, Andalucía, Comunidad Valenciana y Extremadura han promovido un manifiesto 'Por un sector hortofrutícola sólido, competitivo y sostenible' que se firmó este jueves en Berlín, coincidiendo con la celebración de la feria Fruit Logistica. Junto a los responsables sectoriales de las cuatro comunidades autónomas, también estamparon su firma por colectivos profesionales como las patronales de productores y exportadores Fepex y Proexport, entre otras. El documento recoge las principales demandas que serán trasladadas al ministro de Agricultura, Luis Planas, y al comisario de Agricultura, Christophe Hansen.
El manifiesto reivindica una mayor cooperación entre las instituciones europeas y el sector agrario y se demanda una mayor flexibilización y simplificación normativa en la futura PAC y en la legislación medioambiental. Se considera fundamental trabajar en la revisión de las exigencias ambientales europeas derivadas del desarrollo del Pacto Verde Europeo y que se han materializado en iniciativas como la Estrategia de la Granja a la Mesa, la Estrategia de Biodiversidad o la Ley de Restauración de la Naturaleza.
En cuestiones de sanidad vegetal, el manifiesto expone que los efectos del cambio climático y los riesgos derivados de la llegada de nuevas plagas están provocando un aumento de los daños y las pérdidas en los cultivos. Para hacer frente a esa situación, se propone, por un lado, que los productores comunitarios puedan disponer de herramientas eficaces y suficientes para proteger los cultivos, proponiendo que se hagan estudios de impacto antes de eliminar herramientas fitosanitarias actualmente disponibles. Y por otro lado, se reclama una intensificación de los controles fitosanitarios y de residuos de fitosanitarios sobre los productos agrícolas procedentes de terceros países en los puntos de entrada a la Unión Europea y la estricta aplicación de la normativa en vigor en todos ellos.
Con relación también a las importaciones, sin estar en contra de la globalización y del libre comercio, los firmantes del manifiesto consideran que está en juego la competitividad de los productores, dado que deben hacer frente a la entrada de frutas y verduras cultivadas en países con unos costes laborales, ambientales y sociales muy diferentes a los europeos. Es esencial, por tanto, avanzar en unas reglas de juego homogéneas y justas para el comercio internacional.
En este sentido, con relación a los acuerdos con países terceros como el de Mercosur, se considera prioritario, en lo que respecta al sector agrario, un análisis exhaustivo de su impacto sobre los diferentes productos y las zonas o regiones de la UE que resultan más afectadas, estableciendo las medidas económicas compensatorias sobre los mismos.