
El grupo Telefónica, presidido desde enero por Marc Murtra, cerró el ejercicio con unas pérdidas de 49 millones de euros tras contemplar cómo se deterioraban sus activos en Sudamérica. De excluirse una provisión de más de 2.000 millones para hacer frente a estos impactos, el beneficio hubiese sido de 2.304 millones, según comunica a la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
En el último trimestre del año, el deterioro de activos alcanzó los 1.274 millones en Argentina; 397 en Chile, 108 en Perú y 243 millones en la filial tecnológica Telefónica Tech.
Los ingresos netos subieron un 5,4% en el cuarto trimestre del año, principalmente en Argentina, lo que compensó la depreciación del real brasileño y de otras divisas latinoamericanas. En el conjunto del año, la cifra de negocios aumentó un 1,6% hasta los 41.315 millones.
La compañía mantiene su oferta de retribuir a los inversores con 30 céntimos por acción. De ellos, quince corresponden al dividendo de 2024, y que ya se abonaron en diciembre, y el resto en junio y diciembre de este año y en junio de 2026.