Santiago Martínez, a la izquierda, es presidente de Fecoam. A la derecha, comisión de gobierno de Proexport
La Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia (Fecoam) advierte que los planes del Gobierno central de recortar en un 50% los envíos de agua del Trasvase Tajo-Segura para los regadíos de la Región de Murcia "aísla hídricamente" a la región, y supondrá "la pérdida de miles de puestos de trabajo".
Para Santiago Martínez, presidente de la federación, los planes expuestos por el ministerio para la Transición Ecológica para 2027 "significarán una catástrofe", ya que se unen al cierre de los acuíferos de la cuenca del Segura "sin ninguna alternativa", algo que nos convertirá "en una región dormitorio".
"Fecoam y sus cooperativas reciben suministros en un porcentaje altísimo del Trasvase", que dejarán de regar las tierras sin esos aportes hídricos, remarca Santiago Martínez, "pero el desastre afectará a toda la sociedad, no solo a las cooperativas".
"Con este recorte injustificado que se pretende aprobar para 2027" se acabará con la continuidad del modelo productivo de la Región de Murcia, "afectando a miles de familias".
En términos similares se ha expresado la Comisión de Gobierno de la patronal de productores y exportadores, Proexport, que se ha reunido de urgencia para analizar la difícil situación a la que se enfrenta el sector.
Proexport y sus empresas asociadas, las cuales generan más de 28.000 empleos directos, se alinea con el Sindicato Centras de Regantes (SCRATS) y se opone frontalmente a las propuestas del Ministerio que, en caso de llevarse a cabo, provocarán una debacle en la economía regional como consecuencia del cierre de empresas y la pérdida masiva de empleos.
Mariano Zapata, presidente de Proexport, ha mostrado su preocupación ante esta situación. “Si finalmente se activan las medidas previstas por el Gobierno, la repercusión social para el sureste español puede ser demoledora, sin agua para regadío es insostenible la agricultura, lo que supondría, el abandono de los agricultores, el cierre de muchas empresas y la consiguiente pérdida de puestos de trabajo y de generación de riqueza para la zona”, ha dicho.
Asimismo, advierte Zapata de que no se está teniendo en cuenta la salud y el bolsillo de los ciudadanos, que dejarán de tener a su disposición alimentos saludables y a precios razonables, producidos aquí, en su país. “La posición del gobierno central con respecto a la gestión del agua para regadío es un auténtico despropósito. Se olvidan de que es en las regiones del sureste español donde se producen la gran mayoría de las frutas y hortalizas que se consumen, no solo en España sino en Europa. Esto llevaría a un desabastecimiento de la población”.



