
El juzgado de lo Mercantil número 3 de Murcia ha ordenado la liquidación de la empresa jumillana Bodegas Fernández, en concurso de acreedores desde mayo de 2021 después de que no lograra refinanciar la deuda.
Las bodegas fueron fundadas en 1920 y actualmente las dirigían la tercera generación de la familia Fernández. Las primeras elaboraciones tuvieron lugar en el paraje conocido como La Jimena y después se trasladaron en dos ocasiones a las proximidades del casco urbano.
Sus vinos embotellados se comercializaban bajo las marcas Campoclaro, Campolargo, Perla Real, Vega Jimena y Escudo de Plata.
El año en que presentó el concurso cerró el ejercicio con una plantilla de media docena de trabajadores y unas ventas de 265.000 euros, arrastrando unas pérdidas de ejercicios anteriores de más de 1,7 millones de euros y unas deudas por el mismo importe.
Ese mismo año se produjeron varias concentraciones de acreedores ante las puertas de la bodega. En ese momento, un centenar de viticultores denunciaban que les adeudaban la cosecha de los dos años anteriores.