Tras aumentar un 2,1% en 2023 gracias al buen ritmo del avance de la afiliación a la Seguridad Social, la economía de la Región de Murcia experimentará un avance más moderado en 2024 (1,6%), según revela el estudio de la situación de la Región de Murcia que publica hoy BBVA. Ese ritmo moderado irá evolucionando con una tendencia que irá de menos a más.
En ese sentido, se prevé que el PIB de la Región de Murcia se incremente un 2,5% (al mismo ritmo que el conjunto del país) en 2025, retornando a un aumento del PIB similar al promedio de los últimos 25 años (1995-2019, 2,6%). Esto se explica por la caída en el precio de los combustibles y de la inflación, que a su vez facilitará una reducción de los tipos de interés.
Esto permitirá crear 34.000 empleos en el bienio y reducir la tasa de paro hasta el 11,5% en 2025.
La desaceleración que muestran la mayoría de indicadores en la segunda mitad de 2023, las restricciones de mano de obra en algunos sectores, los tipos de interés elevados y la inflación aún alta, etc., llevan a un menor crecimiento también en la parte inicial de 2024. La mejora del contexto vendrá con una recuperación progresiva de la demanda europea, lo que favorecerá las exportaciones.
No obstante, el estudio de BBVA percibe problemas de oferta en ciertos sectores que limitan el crecimiento: las exportaciones de alimentos y la producción industrial de bienes de consumo siguen mostrando cierta debilidad, afectadas por la sequía. Los visados de obra nueva muestran una elevada volatilidad, mientras que los de obra no residencial caen. El gasto por parte de extranjeros modera su contribución y se puede estar agotando su capacidad de aportar al crecimiento.
