
Alrededor de 600 trabajadores de la Región de Murcia se desplazarán a la vendimia francesa este año, campaña que empezará en la segunda quincena del mes de agosto.
Procedentes de todo el país, se espera que viajen a Francia en torno a 13.500 personas, una cantidad similar a la del año pasado, según ha informado el sindicato UGT.
El cupo de vendimiadores españoles viene decreciendo paulatinamente a lo largo de los últimos años debido a que la vendimia en Francia es una de las actividades agrarias en las que más ha avanzado la innovación tecnológica, hecho que también ha influido en la disminución de la media de duración de los contratos, que actualmente oscilan en torno a los 20 días, en función de la climatología, de la cosecha del año y del departamento francés en el que se desarrolle la vendimia.
Aunque el periodo de la vendimia francesa se extiende desde la segunda quincena de agosto hasta el mes de octubre, se da la circunstancia de que numerosas personas trabajadoras aprovechan la recogida temprana y se desplazan a otras zonas para la vendimia tardía y así extender su permanencia desde los 20 y 25 días programadas en la campaña, hasta alcanzar y superar los 40 días.
La mayoría del contingente de personas trabajadoras que se desplaza a la vendimia francesa procede de Andalucía, donde se incorporan en torno a las 10.150 personas, seguido de la Comunidad Valenciana, que aporta unas 900 personas, la Región de Murcia, con 600 y Castilla La Mancha con 400. Del resto de las comunidades autónomas parten unas 1.450 personas.
El salario que van a percibir depende de la categoría profesional y del departamento francés en el que trabajen, pero nunca va a ser inferior al salario mínimo interprofesional de crecimiento (SMIC), que está fijado en 11,88 euros/hora, frente a los 9,08 euros/hora establecidos como media en los convenios provinciales que están actualizados en España.
Sebastián Serena, secretario del sector agroalimentario de UGT FICA, ha insistido en que el cupo de temporeros y temporeras se desplaza al país vecino lo hace fundamentalmente por las condiciones económicas y sociales existente en Francia que “desgraciadamente, no encuentran en el sector del campo en nuestro país”.