
La consultora internacional Deloitte, una las integrantes de las denominadas Big Four (las cuatro mayores firmas especializadas en finanzas y auditoría), fue una de las dos compañías elegidas por la banca en la negociación del preconcurso de acreedores de la murciana Soltec. Ahora, una vez firmado el acuerdo -pendiente del visto bueno por parte de la Junta extraordinaria de accionistas prevista para el 1 de septiembre- y que le permitirá reestructurar la deuda y vender el 80% de la empresa al fondo de origen suizo DVC Partners, la compañía que preside Mariano Berges ha seleccionado a Deloitte como Chieff Restructuring Officer (CRO).
Esta figura de ‘Director de Reestructuración’ (como sería su traducción del inglés) tiene como responsabilidad proponer y vigilar los cambios estructurales en los procesos y la estrategia empresarial para reflotar la solvencia económica de la empresa. Por tanto, su desempeño sería temporal en tanto gestiona las causas y consecuencias de la crisis.
Como informa hoy el periódico ElEconomista, el ‘equipo reestructurador’ asumirá el encargo durante los tres próximos años y el nuevo CRO (Deloitte) habría recibido la conformidad de la banca, principal acreedora de Soltec.
La hoja de ruta ya iniciada por Soltec pasa por continuar desprendiéndose de la división de construcción y gestión de parques solares y centrarse en su actividad inicial: el suministro de seguidores solares.