
Ramón Luis Valcárcel, expresidente de la Región de Murcia ha sido contundente en su declaración de este lunes en el juico del caso ‘Novo Carthago’ al que ha acudido como testigo.
Valcárcel ha negado la mayor y asegurado que “no dio el visto bueno para ese proyecto”. El expresidente ha afirmado ante el tribunal que quien fue su consejero de Medio Ambiente, Antonio Cerdá, sentado en el banquillo como acusado, nunca le había comentado nada sobre el macroproyecto urbanístico asociado al caso de corrupción; y que únicamente le hicieron llegar la presentación del mismo en 2003, cuando “se enteró” de las polémicas viviendas y hoteles a orillas del Mar Menor.
El expolítico popular ha declarado que no recibió advertencias sobre las posibles externalidades negativas para el medio ambiente, afirmando que, de haber sido así “no estaríamos aquí”.
El que fue presidente de la CARM entre 1995 y 2014 ha insistido en rebajar su poder y sus capacidades como presidente, aludiendo a que “no tenía capacidad” de decidir sobre dicha promoción de viviendas, teniendo en cuenta que, según él, tenía en total “más de 50.000 funcionarios”, además de todos los consejeros y directores generales que le seguían en la estructura del Gobierno regional.
Valcárcel ha afirmado, además, con rotundidad, que no conoce, ni sabe cómo es “físicamente”, el promotor de Hansa Urbana, Ángel Luna, la empresa promotora de hasta 10.000 viviendas, hoteles de lujo y campos de golf, para los que se recalificaron irregularmente terrenos en el entorno del Mar Menor.