Fábrica de Liwe en Puente Tocinos
La empresa murciana Liwe (propietaria de las tiendas Inside), y que se encuentra en preconcurso de acreedores desde el pasado mes de abril ha convocado a sus accionistas a una Junta General que deberá aprobar el Plan de Reestructuración que está negociando con la banca.
Esta junta, anunciada para el 25 de noviembre en primera convocatoria o el 26 en segunda, está compuesta mayoritariamente por la familia Pardo, fundadora de la empresa y el directivo Fernando Bernabé. En total, siete personas poseen el 84,5% del capital.
El citado plan de Reestructuración pasa por una quita del 49% de la deuda con las entidades de crédito, que a 30 de junio alcanzaba los 55,4 millones de euros a corto plazo y otros 4,6 a largo. Esta deuda, por tanto, incluye ni deudas con las propias empresas del grupo ni lo adeudado a proveedores y otros acreedores. En total serían 69,4 millones como pasivo corriente y otros 5,8 como pasivo no corriente (con vencimiento superior a un año).
Entre otras propuestas del consejo a la Junta se encuentra la cesión como garantía a la banca (pignoración) de 20.210 acciones de Liwe que se mantienen en autocartera. Esta cantidad apenas representa el 1,3% de los 1,66 millones de títulos. Su valor nominal, a un precio de 3,15 euros por acción, sería de 66.630 euros dentro de un capital social de 5,2 millones de euros. En su última cotización en el Mercado Continuo el pasado mes de enero, las acciones cerraron a 10,10 euros, con lo que el valor alcanzaría los 224.000 euros.
Otra propuesta del Consejo presidido por Juan Carlos Pardo Cano es formalizar una hipoteca a favor de los bancos acreedores sobre los 17.000 metros cuadrados que ocupan las instalaciones de Liwe en Puente Tocinos, inauguradas en 1973.
La empresa cerró el primer semestre del año con unas ventas de 41,2 millones de euros y unas pérdidas de 20,5 millones de euros, diecisiete veces más que al cierre del mismo periodo de 2024.
En esos seis primeros meses del año, Liwe redujo su stock en un 26,5% para aminorar costes, al tiempo que cerraba 34 tiendas en España -cinco en córner de El Corte Inglés-, dos en Portugal y las cuatro que tenía en Italia. Posteriormente continuó cerrando medio centenar más de establecimientos, dejando su red en menos de 250 tiendas.


