Imagen de una pasada manifestación de agricultures en Bruselas
La organización agraria Coag ha estimado que el recorte del 18% en las ayudas directas de la PAC propuesto por la Comisión Europea para el periodo presupuestario 2028-2034 tendría un impacto devastador tanto para la viabilidad de las pequeñas y medianas explotaciones agrarias como para el bolsillo de millones de familias europeas. En este caso, la cesta de la compra se encarecería entre un 6,5% y un 9,3%´.
El ajuste presupuestario proyectado a partir de 2028 implica una pérdida directa de 877,5 millones de euros en rentas agrarias. Para compensar ese déficit, los productores se verían obligados a repercutir un incremento del 2,32% en los precios en origen, según los cálculos realizados por los servicios técnicos de Coag.
Sin embargo, debido al funcionamiento real de la cadena alimentaria, donde los aumentos se trasladan con rapidez y las bajadas apenas se perciben, este ajuste en origen se multiplica hasta por cuatro a medida que avanza hacia el consumidor final. Además, la desregulación de los mercados que lleva aparejada la reforma PAC incidiría aún más en la especulación con los precios de los alimentos.
Según el análisis técnico realizado por esta organización, el encarecimiento final del precio de venta al público oscilaría entre un 6,5% en un escenario conservador (cuando industria y distribución absorben el 30% del impacto) y un 9,3% en un escenario pesimista (cuando la totalidad del incremento se traslada al consumidor final).
La aplicación de los incrementos porcentuales proyectados (6,5% y 9.3%) al gasto medio anual de 5.391 euros en alimentos y bebidas no alcohólicas, permite cuantificar el impacto directo en el bolsillo del consumidor entre 350 y 501 euros más al año.
Manifestación en Bruselas
Esta organización ya ha anunciado que se suma a la manifestación de agricultores convocada para el 18 de diciembre en Bruselas contra el “hachazo” al presupuesto agrario, la propuesta de reforma de la PAC, los acuerdos de libre comercio con terceros países (caso de Marruecos o Mercosur) y la asfixia burocrática.



