Los inversores del BBVA se reafirman en su entidad y vuelven a confiar en sus acciones. Suben su precio un 2,29% después del rechazo de fusión de Sabadell. No obstante, el precio de la acción sigue en los 10,06 euros a las 14 horas de este martes, unos 90 céntimos por debajo del precio antes de que BBVA realizara su oferta.
Por su parte, los inversores del banco Sabadell han tenido la reacción contraria: los precios de las acciones del banco de origen catalán caen un 1,32%. Sin embargo, el precio de la acción sigue en los 1,86 euros, todavía por encima del precio de 1,74 euros previo a la oferta de BBVA el pasado 30 de abril.
El banco Sabadell, que rechazó la fusión, entre otras cosas, porque la caída de los últimos días de las acciones de BBVA añadía mucha incertidumbre a la oferta, afirmó sentirse muy infravalorado por la propuesta de BBVA. Desde el banco de origen catalán afirman confiar en sus planes de futuro y promete a sus inversores repartir excedentes superiores al 13% de ratio.
En estos momentos BBVA tendrá que decidir si seguir con su plan de hacerse con Sabadell mejorando sustancialmente su oferta o, dado el contundente rechazo, aceptar ‘a tiempo’ que la fusión ha vuelto a no cuajar y rendirse.
Lo que podría perjudicar a la imagen de BBVA, según algunos expertos, sería insistir con una OPA hostil y que obtuviera la misma respuesta.
Ya se trataba de una oferta arriesgada y se comprobó con la reacción negativa de sus inversores; una nueva más generosa y con el mismo rechazo podría dañar decisivamente el prestigio de su directiva.
La Comunidad Valenciana respira con el rechazo
El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), Salvador Navarro, ha mostrado su alegría por el rechazo de la oferta por parte de Sabadell. El banco catalán, que desde 2017 tiene su sede fiscal en Alicante, es, para el presidente de la patronal valenciana un aliado muy útil y que es y seguirá siendo muy importante para toda la Comunidad Valenciana y en especial para Alicante.
Ya se mostró reacio a la fusión cuando se anunció la oferta, el mismo presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, que afirmaba “no gustarle nada” la propuesta.
