
El grupo Santander ha informado en un comunicado ha tenido conocimiento reciente de un acceso no autorizado a una base de datos de la entidad alojada en un proveedor.
Esta intromisión ha supuesto el acceso a información de clientes de Santander en España. También de clientes Chile y Uruguay, así como de todos los empleados y algunos exempleados del grupo en estos tres países.
La entidad financiera asegura que en dicha información no hay datos transaccionales ni credenciales de acceso o contraseñas que permitan operar con el banco. “Las operaciones y sistemas no están afectados y los clientes pueden seguir operando con seguridad”, afirman desde la compañía.
El banco asegura haber implementado de inmediato medidas para gestionar el incidente, como el bloqueo del acceso a la base de datos y un refuerzo de la prevención contra el fraude para proteger a los clientes.
Las fuerzas de seguridad y los reguladores ya han sido notificados con las que el banco seguirá colaborando para proteger su ciberseguridad.