
La organización profesional agraria Asaja Murcia ha señalado que Egipto es una gran amenaza para el sector hortofrutícola murciano, así como para el español.
Egipto cada vez produce más. Por ejemplo, la uva egipcia aumentó su cosecha un 58% desde 2020 a 2023; la berenjena un 38%, y el mango, la guayaba y el mangostán un 13%.
Sin embargo, lo que más ha aumentado, no solo su producción, sino también su importación ha sido la patata: la importación española de patata procedente de Egipto en 2019 se situó en 2.463 toneladas y el año 2023 se elevó a 50.488 toneladas, lo que supone un crecimiento del 1.958%
El principal problema que señalan desde Asaja es la competencia desleal: consideran que cometen ‘dumping social’ al vender más barato del precio de mercado por no cumplir con los mismos protocolos fitosanitarios o no pagar suficiente a sus trabajadores.
“Es muy importante reforzar los controles fitosanitarios para evitar que puedan propagarse plagas y enfermedades que entren en Europa”, señalan desde la organización agraria.
Para el secretario general de Asaja Murcia, Alfonso Gálvez Caravaca, es muy difícil competir con países como Egipto, donde sus costes son ínfimos en comparación con los de los murcianos o españoles.
Aranceles como solución
Por su parte, el presidente de Asaja Murcia, Juan de Dios Hernández, también destacó como fundamental que la Unión Europa ponga en marcha medidas para proteger a los productores europeos de frutas y hortalizas; la más importante sería “aplicar tasas arancelarias a países terceros como Egipto, que quieran acceder al mercado europeo".
“No podemos ser competitivos frente a países como Egipto, por lo que los dirigentes europeos tienen que verdaderamente trabajar para defender nuestros intereses, pues estamos perdiendo cuota de mercado en Europa a pasos agigantados”, añadió el presidente.