Domingo, 07 de Septiembre de 2025
Diario de Economía de la Región de Murcia
OPINIÓNLa batalla de la micromovilidad (2023-2026)
  • Buscar
Ernest Berkhout

La batalla de la micromovilidad (2023-2026)

 

[Img #7010]Las nuevas formas de moverse por la ciudad siguen siendo campo de batalla en las urbes europeas. En París a principios de 2023, rodaban (scootaban) más de 15.000 patinetes eléctricos de alquiler por sus calles, por sus aceras, y por todos lados. París era ciudad pionera en la utilización del aparato, reduciendo el uso del vehículo de combustión, y mejorando la calidad del aire en la bulliciosa capital francesa. Pero tan caóticos eran sus usuarios, y tan acogotados el resto, que la alcaldesa, socialista e inicialmente promotora del asunto, decidió hacer un referéndum con una simple pregunta sobre el 'scooter électrique'. Sí o no. Votaron menos de uno de cada diez parisinos, pero se ve que todos cabreados, porque el 'Non' ganó con 90% de los votos.

 

Si mañana el alcalde decide hacer un referéndum similar en la ciudad de Murcia, pasará lo mismo. Los patines viajan como si fuera una ciudad sin Ley, en sentido contrario, a toda mecha, por las aceras, saltando semáforos en rojo. A veces cuando llevas un patinete, notas al llegar a un semáforo en ámbar, con un cruce de peatones como las personas mayores te quedan mirando, aterrorizado, ¿va a parar éste o no? No hace falta decir que reconozco la necesidad de ser cívico a bordo del enemigo número uno. Hay que ser cortés, y dejar pasar de manera exagerada, con una sonrisa, pase usted, porque forma parte de la batalla del scooter. Que va a ser larga.

 

Según la jefa de movilidad del ayuntamiento parisino, no es que ni siquiera hubiera muchos accidentes. Pero hubo una sensación de inseguridad que se consideraba importante. El referéndum sólo preguntaba sobre los scooters de alquiler y no sobre los que usaban sus propietarios. Claro, el patinete privado es mucho más difícil de prohibir.

 

En Madrid, están este año con los mismos líos, aunque sin referéndum. El ayuntamiento ha decidido poner fin a los de alquiler. No importa que la campaña de "Madrid tiene otro AIRE", con la imagen de una nube en forma de patinete eléctrico sigue publicitándose hoy. Los más de 6.000 patinetes de alquiler tienen que desaparecer de las calles de Madrid. Sólo un problema: las empresas operadoras adjudicatarias piensan luchar. Una de ellas, con nombre de fruta amarga, ha publicado los datos de seguridad dentro de la ciudad de Madrid, y es que el 99,99% de los 1,69 millones de viajes realizados en 2023 con sus patinetes concluyeron sin incidentes. Y del 0,001% que sí sufrió algún percance, la nota recuerda que ninguno "supuso lesiones graves que necesitasen hospitalización". La verdad, parecen datos sorprendentes. Habrá que contrarrestarlos. Una amiga cirujana maxilofacial, en el sector privado, dice que ¡le vienen muy bien los patinetes eléctricos! 

 

[Img #7011]

 

Hay más de cinco millones de ¡Vehículos de Movilidad Personal¡ en España hoy en día. Se definen como vehículos con una o más ruedas que están dotados de una única plaza y propulsado, exclusivamente, por motores eléctricos. Una bicicleta eléctrica, por tanto, no es un VMP. Una empresa aseguradora muy conocida en España publicó hace poco un informe sobre el VMP. Se describe cada accidente en detalle, y da para un rato de lectura interesante, aunque un poco deprimente. Murieron 11 personas en accidentes con VMP, todos ellos llevaban el patinete, y chocaron con algún objeto en su camino, como un autobús o un turismo. Alguno de ellos atropellado por un tren cruzando la vía (con su patinete) con las barreras bajadas. Otro en un patinete que tan trucado estaba que alcanzaba los 120 km/h. Merecedores de una página en los Darwin Awards, vaya.

 

En Paris, la cancelación del patinete eléctrico de alquiler ha llevado a un incremento salvaje de las bicicletas eléctricas, también de alquiler. La gente que aprendió lo liberador que es ir de puerta a puerta por un carril dedicado, sin tener que preocuparse ni de la congestión de tráfico ni de esperar al autobús, o al tranvía, no iba a dejar de usar la micromovilidad. Su uso sigue in crescendo, como aquí en Murcia, donde los carriles bici de la Gran Vía funcionan estupendamente, con un trasiego diario de miles de patinetes, bicis eléctricas, bicis de tracción humana y demás modos de transporte.

 

El uso responsable de estos vehículos se pueda promocionar mediante la imposición de multas para los que zumban por los carriles a cincuenta por hora. Y los de alquiler, si lo dejas tirado en un sitio no autorizado, que hagan pitar tu móvil de forma insistente quizá. Después de todo, estás identificado. Pero no sigamos el camino de la alcaldesa de Paris con el referéndum,  ni el de Madrid con su decretazo. Dejemos abierta la elección de movilidad a los ciudadanos, cada uno tendrá sus necesidades específicas.

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.